Inicie mi proceso con Sandra hace un año. Decidí buscar una coach porque, aunque siempre he sido una mujer independiente y he podido resolver mis problemas sola llego el punto donde esa estrategia no me funciono más.
Afortunadamente la encontré a ella, mucho más que un coach, Sandra emplea diversas herramientas para apoyar de forma integral todo el proceso.
En mi caso empezamos trabajando el área personal bajo dos enfoques el niño interior y constelaciones familiares, entendiendo cuales han sido las dinámicas y alineaciones de mi familia. Pude ver claramente esos patrones, creencias limitantes y conductas que se han repetido en mi árbol genealógico por generaciones y que yo repetía sin saber de dónde provenían. Para mi esta etapa fue muy sanadora, aunque revolcó no solo todo mi ser (para bien) también movió mi sistema familiar. Incluso a raíz de mi experiencia personal dos miembros de mi núcleo familiar más cercano empezaron también su propio proceso guiados por Sandra. Esto ha sido crucial para entender el perdón, no repetir patrones, aprender a SER y dejar SER todo desde el AMOR, el respeto, la comprensión y la compasión.
Me enorgullece honrar mi camino, aceptar con admiración que cada cosa que he vivido ha sido justa y necesaria para mi proceso de aprendizaje al igual que los procesos de los demás.
Una vez mi niña interior estuvo en paz, pude avanzar a la segunda etapa del proceso, aunque el trabajo interior nunca termina, siempre hay algo que mejorar.
En la segunda etapa el proceso nos enfocamos en lograr ser la persona que sueño ser, vivir mi vida de manera plena, liberar todo mi potencial humano y hacer feliz a la adulta. Este proceso Sandra lo llama “Diagnostico Estratégico Personal”.
Para esto empezamos analizando todas las áreas de mi vida a nivel personal, profesional y social. Sandra me dijo “la mayoría de las personas no sabe lo que quieren porque no saben quiénes son, cuando lo descubras tu visión de vida te ayudará a llegar dónde tú quieres”.
El trabajo interior fue la base para saber quién soy realmente desde mis creencias hasta mis patrones de comportamiento. Para profundizar en el área profesional Sandra empleó la herramienta de Eneagrama para saber cuáles son mis principales eneatipos y la herramienta DISC que me ayudo a comprender mi Estilo Natural de comportamiento, mis fortalezas y oportunidades de crecimiento.
En este punto, el panorama se hizo más claro y logre entender cuál es el propósito de mi vida y así buscar la mejor estrategia para vivir esa vida. También empleamos una herramienta llamada el Test de las Pasiones, el cual sirve para priorizar lo que es más importante en tu vida. Mi proceso fue integral, ahora mis prioridades a nivel espiritual, profesional-económico y familiar son claras. Me permito hacer lo que realmente me gusta, trabajar en lo que siempre quise, tener relaciones familiares y amistades más sanas y lo más importante fortaleza espiritual para vivir una vida con propósito.
El resultado tangible de todo mi proceso con Sandra fue un mapa de vida, el cual me sirve de guía para seguir viviendo la vida que sueño vivir con una visión clara de mi propósito. Aunque cada día tengo retos mi reacción ante ellos es diferente, he madurado y crecido. Me siento más segura, más creativa, más conectada con todo y viviendo un día a la vez. Se han quedado atrás muchas de las creencias y patrones que me bloqueaban y que me impedían desarrollar mi propio potencial tanto en mi vida personal como profesional.
Sandra desde el fondo de mi corazón te agradezco por guiar mi proceso de una forma tan profesional y respetuosa.